En la apertura de una mesa redonda, durante el 7 Days of Genius Festival, una semana de ideas e investigación organizada por el centro cultural 92nd Street Y –donde personas de todo el mundo se conectan a través de la cultura, las artes, el entretenimiento, y la conversación– en la ciudad de Nueva York, los científicos Michio Kaku, Antonio Damasio, y JoAnn Deak estuvieron de acuerdo en que la noción popular de «genio» se ha expandido más allá de los valores atípicos como Albert Einstein y Leonardo Da Vinci para incorporar a la gente en la parte superior de su campo de especialización.
Steve Jobs y Bill Gates, por ejemplo, puntúan entre las cinco primeras personas estadounidenses identificadas como genios en una encuesta realizada por 92Y. En la encuesta, se identificó de inmediato un sesgo: el 90 por ciento de los estadounidenses piensa que los genios tienden a ser hombres.
Ese sesgo desmiente otro supuesto oculto: que el genio es una característica exclusivamente poseída por los individuos pues hoy, la innovación y el rendimiento dependen de la contribución de muchos. Una razón es que mucha más gente habita ahora el planeta y los expertos se interconectan cada vez más entre sí.
Además, los sistemas de hoy en día son más complejos, ya sean tecnológicos o de diversa índole. Jobs, famoso por unir los conceptos de diseño y actividades artísticas con la informática personal consideraba que su mayor logro era haber construido equipos de personas creativas. Su biógrafo Walter Isaacson dijo:
«Una vez le pregunté a Steve Jobs, ¿de qué producto te sientes más orgulloso?. Y pensé que podría decir el iPod, el iPhone o el iPad… me dijo, hacer un producto es difícil , pero crear un equipo que continuamente pueda hacer los productos es aún más difícil «. El producto del que estoy más orgulloso es del equipo que construí en Apple.
No importa cuán capacitado estés para cumplir determinada función o rol de forma individual, los equipos aportan más información en bruto, más contexto, más diversidad y más horas de experiencia.
Por supuesto, lo que les permitió compartir ideas y trabajar hacia el mismo objetivo es un asunto diferente. Liderar un equipo de expertos para alcanzar alturas creativas puede ser la verdadera marca del genio de hoy. The Harvard Business Review, muestra lo que un equipo de expertos en negocios explica sobre las reglas de interacción del un equipo estimulado por un genio creativo:
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«En general, las reglas de combate se dividen en dos categorías, la primera es cómo las personas interactúan, reglas que aportan a la confianza, el respeto y la mutua influencia. – La creencia de que todos en la comunidad tienen voz y que pueden influir en las decisiones es de vital importancia. La segunda categoría es la forma en que la gente piensa, y esas normas exigen cuestionar todo y analizarlo. «
Arroja mejores resultados un logro creativo en contexto grupal en vez de esas nociones de genio solitario pues serlo no es tan bueno como parece. Como explica el historiador James Gleick, a menudo ser exitoso significaba ser solitario y aislado incluso de los colegas y amigos profesionales más cercanos, hoy esto juega en su contra porque lo que genera mejores resultados son las ideas producto del brain storing más conocido como lluvia de ideas.
*Basado en “Genius belongs to creative teams not just individuals” por Orion Jones. Disponible en http://bigthink.com/ideafeed/genius-belongs-to-creative-teams-not-just-individuals
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